miércoles, 28 de marzo de 2012

FIC XCV

 
 95. No hay que bajar los brazos.


El Real Madrid ya está en el Camp Nou. Quedan aproximadamente 2 horas para que de comienzo el partido tan esperado por toda España, Europa e incluso el mundo entero y los jugadores se tranquilizan tomando café, llamando a sus familias y hablando entre ellos en el césped del estadio más grande de España.

     - ¿Alguno sabe con quién habla el Pipita? – pregunta Ramos.
     - Hablará con Male – dice Esteban.
     - Imposible porque lleva casi media hora y Male acaba de hablar con Alicia.
     - Estará hablando con su padre o hermanos – dice Xabi.
     - Esa cara no es de cuando habla con sus hermanos – apunta Raúl.
     - ¿Quién es Naye? – pregunta Antonio acercándose al resto de sus compañeros.
     - ¿Un perro? – contesta Raúl.
     - Muy gracioso.
     - ¿Por qué lo preguntas? – pregunta Álvaro.
     - Curiosidad.
     - ¿Pero quién habla con esa tal Naye? – pregunta Esteban.
     - Gonzalo.
     - ¿Quién será? – dice Raúl pensativo.
     - ¡Ali! – grita Raúl.
     - ¡¿Dónde?! – se gira Sergio gritando.
     - ¡Yo que sé! Digo que ella sabrá quien es.
     - Chori, pensemos un poquito – le pide Álvaro – Ali es amiga de Male, ¿tú crees que sea quien sea se lo contaría a ella?
     - Dejar de decir tonterías, como va a engañar Gonzalo a Male – pone cordura Xabi.


Casillas, Ramos, Pepe, Carvalho, Marcelo, Khedira, Xabi Alonso, Özil, Di María, Cristiano y Benzema es el once elegido por José Mourinho para el clásico español.

El partido comienza con un ritmo frenético. Con un Barcelona mandando y dejando claro que el Clásico se juega en la ciudad condal. Así, a los nueve minutos llega el 1-0 de Xavi tras una buena combinación con Iniesta. El Madrid no acusa el golpe y responde de inmediato con un zapatazo de Di María que despeja Valdés con apuros. Minutos después, una gran jugada de Cristiano Ronaldo es salvada in extremis por Abidal.

Pero cuando mejor esta el Madrid llega la contra del Barcelona. Villa se marcha de
Ramos y centra para que Pedro haga el 2-0 en el minuto 18. Los de Mourinho tiran de orgullo y buscan la meta de Valdés. En el 38 llega la jugada polémica del partido. Cristiano se adelanta a Valdés en la lucha por un balón dentro del área y el meta catalán derriba al portugués. Penalti claro que no ve Iturralde para desespero de Cristiano. Con esta decisión polémica se llega al descanso.

Tras terminar la primera parte una Alicia avergonzada no quiere seguir fotografiando  el bochornoso juego del Real Madrid y prefiere retirarse a las gradas habilitadas a jugadores descartados y directiva.
Junto a Zidane continua viendo y deseando que su equipo de un giro al juego y al partido.

La segunda mitad comienza con un cambio en el once del Real Madrid. Mourinho sienta a
Özil y saca a Lass al campo. El técnico portugués busca un mayor control del balón y una mayor posesión. Pero en el 57’ vuelve la polémica al Camp Nou. Villa hace el 3-0 en fuera de juego. Iturralde y su asistente no lo ven así y el tanto sube al marcador. Ese gol termina de hundir al once blanco. Sin solución de continuidad llega el 4-0, también obra de Villa.

Ahí muere el partido. Los blancos tiran de casta y de orgullo pero no es el día. Al Barcelona le sale todo y al Madrid nada y cuando eso sucede en el fútbol no hay nada que hacer por mucho que uno lo intente. Ya en el descuento, el Barcelona hace el 5-0 en una contra. Para finalizar, Sergio Ramos es expulsado por roja directa por una entrada sobre Messi que provoca una tángana entre unos y otros.

Antes de que ambos equipos se dirijan a sus vestuarios con una mirada Alicia le pregunta a Zidane si puede bajar al vestuario tras la expulsión de Sergio, con un asentimiento de cabeza le da su permiso.

Con el semblante muy serio entra al vestuario.

     - Ve a pedirles perdón – dice de brazos cruzados observando a un Sergio muy serio.
     - No – se quita la camiseta cabreado-. Se han mofado de nosotros – la mira.
     - Sergio demuestra los valores que te ha enseñado el club y no dejes que el calentón del partido te convierta en una mala persona porque no lo eres.
     - Lo he hecho por ti – se acerca a ella-, por lo que te hizo.
     - No tenías que haber hecho semejante estupidez.
     - Si ni siquiera toco a Messi.
     - Lo sé y todo el mundo que haya visto el partido por televisión lo sabe pero demuestra que no eres igual dentro del campo que fuera – sale del vestuario y pone rumbo por el mismo camino.
     - Ahora nos vamos – le dice Zidane al pasar por su lado.
     - ¿Adónde? – Voltea para mirarlo - ¿Con quién me voy yo?
     - Vas en el mismo avión pero nosotros iremos antes al aeropuerto por seguridad. Ahora salgo – la sonríe.

Tras los insultos de los propios aficionados blancos a puertas del aeropuerto el trayecto de vuelta es silencioso y triste. Tenso.

Con la mirada perdida cada jugador esta metido en la música que a través de los auriculares llega a sus oídos, la única zona del avión que no hay un ambiente tenso, triste pero no tan silencioso es en los asientos en los que se encuentran Sergio Ramos y Alicia.

     - ¿Cuánto tiempo vas a estar sin hablarme? – la observa escribir.
     - ¿Has pedido perdón? – deja de escribir para escuchar la contestación de su novio.
     - No me contestes con una pregunta.
     - Lo has hecho o no – lo mira.
     - Sí, pero ha sido en vano. No las han aceptado – pierde su mirada al fondo del avión.
     - Eso ya es problema de ellos, tú has demostrado los valores que enseñan en el Real Madrid – lo agarra del mentón para que la mira.
     - Hemos jugado muy mal – susurra apoyando la cabeza en su hombro.
     - Sí, para que engañarte pero no podéis bajar los brazos. No podéis. Esto aun no ha terminado – le acaricia la mejilla con la mano izquierda y le da un beso en la cabeza.
     - ¿Este ataque que escribes hacia nosotros es para mañana? – agarra el cuaderno sin levantar la cabeza del hombro de Alicia.
     - Mi lado profesional tiene que decir lo que ha visto – le da otro beso en la cabeza.
     - Me has mostrado tu lado novia y tu lado profesional te falta tu lado madridista.
     - Gracias por pegar a Puyol y a Xavi pero te a faltado Piqué.


Es día libre para la primera plantilla del equipo y cada jugador aprovecha las horas para hacer cosas que habitualmente no puede hacer.

Tanto tiempo con la cabeza en otro lugar y viviendo el día a día sin ganas que Pamelha no se daba cuenta de la importancia que tiene la vida real. Hace mucho que no iba a clase con una sonrisa y ya es hora de cambiar el dibujo de la cara.

Al abrir la puerta una sonrisa se plasma en su cara, como si el mismísimo Picasso la hubiera retratado, no es la primera vez que ve a sus alumnos pero hacia mucho tiempo que no los veía de verdad. Los veía como unos niños normales, ahora ya no. Ahora vuelven a ser sus niños. Sus pequeños monstruitos.

Tras dar la clase con ganas decide volver a ver la vida con alegría y sentido, llama a su amiga Camila para salir a comer, de compras y divertirse.

     - ¿Te gusta este vestido? – le muestra Pamelha un vestido azul oscuro de media manga.
     - Sí, muy bonito – contesta mirando hacia la entrada de la tienda.
     - ¿Hola? Estoy aquí – le pasa la mano por delante de la cara-. ¿A quién miras? – se gira para mirar el lugar al que su amiga Camila mira.
     - ¡No te gires! – la agarra del brazo.
     - ¿Qué pasa?
     - No es por asustarte pero…
     - ¿No? ¿Enserio no quieres asustarme? – dice irónicamente.
     - ¡Calla idiota! Desde que hemos salido del restaurante hay alguien que nos esta siguiendo.
     - Que paranoica eres – se ríe.
     - Es enserio – dice Camila seria.
     - Igual es un admirador tuyo – se gira.
     - No te gires.
     - Déjame ver quien es.
     - Espera, escóndete – la arrastra de la mano hasta esconderse detrás de un maniquí. Va muy tapado – observa a su amiga paralizada-. ¡Pam! ¿Qué pasa? ¿Lo conoces? – la tambalea.
     - Sujétame esto – le da toda la ropa que lleva en las manos.

Pamelha se dirige a la entrada de la tienda y ve como el chico que las observaba se aleja andando rápidamente.

     - ¡Pedro! – grita Pamelha provocando que el chico camuflado se detenga y se gire muy despacio.
     - ¿Cómo me has reconocido? – se acerca a ella.
     - Muchos años siguiéndote – sonríe-. ¿Por qué nos sigues? – se vuelve a poner seria.
     - ¿Por qué me seguías tú?
     - No es lo mismo. Contesta ¿por qué nos sigues?
     - Iba ha hablarte cuando has salido del trabajo pero te has reunido con tu amiga y no he podido.
     - ¿Cómo me has encontrado?
     - Un detective.
     - ¡¿Cómo?! ¡Me has puesto a un detective! – se acerca a Pedro muy enfadada.
     - Solo quería encontrarte – la frena con las manos.
     - ¿Y no había otras formas? – le recrimina.
     - ¡Pam! – Grita Camila desde la tienda.
     - ¡Voy! – Le devuelve el grito-. Tengo que irme, adiós y no me persigas mas. Ya me dejaste muy claro que soy una sicópata pesada.
     - Espera – la observa meterse a la tienda – dame tu número.
     - Me querías lejos y eso hice.
     - ¡No dejaré de seguirte! – grita Pedro sin recibir contestación.

Pamelha junto a su amiga Camila continúa con sus compras. Por otro lado. Macarena se encuentra en la cafetería de la universidad junto a Nicole, Santiago e Iván escuchando a Alicia en la radio.
El tema el cual debaten son las canteras de los equipos del campeonato nacional cosa que a Macarena no le hace demasiada gracia lo que esta escuchando por parte de la otra colaboradora.

     - ¿Cómo puedes decir que ‘La fabrica’ es mejor que ‘La mesia’? – dice Alejandra indignada.
     - ¿Perdona? ¿Tú escuchas lo que digo o lo que te da la gana?
     - Has dicho: Guardiola utiliza la cantera porque no le queda otra, sino no la utilizaría.
     - Sí, he dicho eso y no miento. Pep Guardiola tiene una plantilla corta y si le sumas sanciones y lesiones algo tiene que hacer y no le queda otra que tirar de la cantera. Todo lo contrario que José Mourinho y el resto de equipos, aunque solo se vea la guerra de canteranos entre el Barcelona y el Real Madrid, el resto de equipos tampoco hacen debutar a tantos canteranos.
     - Otra vez lo estas diciendo – insiste Alejandra.
     - Te repito, en ninguna frase he dicho eso. Digo que las plantillas constan de 24 ó 25 jugadores, si se te lesiona o te sancionan el titular tiras de suplente que es por esa razón por la que cada equipo tiene 25 fichas de primer equipo.
     - Sí señora. Muy buena explicación – dice el locutor.
     - Vuelve ha decir que los canteranos del Barcelona están ahí porque no les queda otra y no porque son buenos.
     - Dale perico al torno. No he dicho eso pero si es lo que piensas dilo tú pero no me atribuyas a mí esas palabras.

Alejandra empieza a despotricar de los jugadores del segundo equipo del Real Madrid. Alicia empieza a cansarse de su actitud y con respuestas elegantes y educadas la hace callar pero esa parte Macarena ya no la ha escuchado.

Cansada de escuchar las tonterías de Alejandra y sintiéndolo por su amiga se levanta de la mesa. Se despide de sus amigos hasta la hora de ir a clase y se marcha a donde pueda estar tranquila y no haya cerca un aparato por el cual salga el sonido de la radio de la universidad.

Sentada en el césped, arrancando la hierba, pensativa. Buscando la respuesta a un por qué.

¿Por qué me pide el número hace una semana, me pide que vaya a verle jugar y ahora es como si nunca hubiera existido?

     - Me temo que nunca sabré la respuesta – dice sin dejar de mirar el césped.
     - Si te la tiene que dar la hierba me temo que si te quedaras sin saberla – dice un chico sentado junto a ella.
     - ¿Qué? – Lo mira sorprendida.
     - Si le has preguntado algo al césped nunca sabrás la respuesta.
     - No acostumbro ha hablar con algo que no sea una persona – vuelve a mirar la hierba-. Hay personas que les hablas y parecen paredes pero con objetos u otras cosas aun no hablo.
     - ¿Contra quien va tu ira? – se pone también a arrancar hierba.
     - Contra ti – lo mira.
     - ¡Jesé! – grita un chico metido entre un grupo de chicos y chicas.
     - ¿Te apetece ir a tomar algo? – la mira después de echar un vistazo rápido a sus amigos.
     - No, no me apetece.

Macarena deja a Jesé sin darle ninguna explicación y vuelve a la cafetería a buscar a sus amigos para ir a clase.

Una vez en la puerta de clase esperan a que llegue Alicia, la ven acercarse pero detenerse junto a un chico y una chica que se ponen a hablarla. Son Jaime y Laura que la frenan para felicitarla por su participación en la radio. Ella con cara seria les agradece las felicitaciones y corriendo y con una sonrisa en la cara se dirige hacia sus amigos que la abrazan y la felicitan.

     -  Tía cuando has dicho: Sergio Ramos le das más a su compañero Lass que a Messi pero muchas veces eso en el campo no se ve si no interesa. Me ha encantado. Me hubiera gustado ver la cara de Alejandra – dice Iván.

lunes, 19 de marzo de 2012

FIC XCIV


  94. Pensativo y dolido.


El Real Madrid Castilla, que milita en la segunda división ‘B’, se esta disputando en el estadio Alfredo Di Stefano el partido contra el equipo canario Vecindario, mientras en el parking del primer equipo una impacientada Macarena se desahoga con la pequeña Paris.

     - Mac, esta pasando de ti – le dice Sergio.
     - Lo sé pero me quejo a Paris para que Ali no me cruce la cara.
     - Jamás haría una cosa así a una amiga.
     - Con tus cambios de humor cualquiera se fía.
     - Ves Paris, por culpa de tu estúpida tía hemos llegado tarde.
     - Es tú culpa por vivir en la otra punta – le reprocha Alicia.
     - Si hubierais salido antes.
     - Mac si se están sorteando el campo – dice Sergio mirando un televisor.
     - Pero no les he visto salir del túnel y no sé quien juega.
     - Que te los diga Ali que se los conoce todos.
     - Yo también los conozco – le lanza una mirada fulminante.
     - Pues no te quejes – le recrimina Alicia-, tira pa’ abajo.
     - ¿No lo veis desde aquí? – interrumpe Esteban desde la cristalera.
     - Em… no  - contestan al unísono a la vez que los miran.
     - Mejor desde la grada – añade Macarena-. Lo que no sé es qué hace la culerda está aquí – señala a Paris.
     - No te metas con mi chica – dice Sergio cogiendo a Paris de los brazos de Alicia.
     - Te reemplazan por una culerda – mira a Alicia.
     - Mira que meten gol – señala el campo a través de la cristalera.
     - ¡Quién! – Se vuelve rápidamente para mirar el terreno de juego-. Puta – la mira mal – si aun no ha empezado.
     - Nos vemos en el descanso – vuelve a coger a Paris y le da un beso a Sergio en la mejilla.

Sergio se coloca junto a Esteban y observa a sus tres acompañantes sentarse en la grada.

     - ¿Le pasa algo a Ali? Tiene mala cara.
     - Esta cansada.
     - Que se hubiera quedado en casa.
     - Ya había quedado con Maca para ver el partido, ¿hay alguien más?
     - Solo he visto a Mesut y a Gonza.
     - Gonza en el gym, ¿no?
     - Sí.
     - Ya veras tú como será malo tanto gimnasio.
     - Va a ser peor el remedio que la enfermedad.

No muy lejos el número 23 del primer equipo observa a las futuras estrellas del Real Madrid.

     - Perdón – se disculpa una voz femenina tras abrirse la puerta-, pensé que estaba aquí el señor Ramos.
     - Siempre buscando a Sergio – gira la cabeza con una sonrisa irónica.
     - Hago mi trabajo – contesta una Soledad seria.
     - Nadie ha dicho lo contrario – vuelve a mirar el terreno de juego.
     - ¿Volveremos a hablar normal? – se acerca a él.
     - No tenemos nada que hablar. Eso me dijiste en tu casa – la mira fijamente-, ¿o miento?
     - No, no mientes – mira a través de la cristalera sin mirar nada.
     - Pues eso, adiós – le sonríe.
     - No me gustó la forma en la que me hablaste cuando fui a buscar a Sergio.
     - Hay tantas cosas que no me gustan y sin embargo me fastidio.
     - ¿No me vas ha hablar?
     - Te estoy hablando.
     - Bien, hablar bien.
     - ¿Pero tenemos algo de que hablar?
     - Contigo no se puede hablar – se voltea enfadada y camina con sentido a la puerta.
     - Cuando no hay nada de lo que hablar no – la mira sonriente quieta en la puerta escuchando esas palaras.
     - Mujeres – dice en alemán tras suspirar.

Tranquilo y con móvil en mano continúa viendo el partido, de vez en cuando echa una mirada a Paris que del mal que esta dando no deja ver el partido a Alicia y a los que se encuentran a su alrededor.

     - ¡Ey! – entra Sergio.
     - Hola – contesta volviéndose para mirarlo.
     - Eylem o tu padre, ¿de quién te alejas? – pregunta de broma ya al lado de Mesut.
     - Ambos – contesta sonriente-. Te buscaba Soledad.
     - Lo sé, ya he hablado con ella. Qué pesada es – resopla.
     - No ha dormido bien – afirma indicando a Alicia con la cabeza.
     - No, Paris le pregunto por su padre.
     - ¿Qué le dijo?
     - Que no sabe quien es. Esta mañana ha llamado a Vanesa para avisárselo.
     - Creo que si Ali la vuelve a ver la estrangula.
     - No lo dudes – sonríe Sergio mirándola-. Lo tranquila que es.
     - Y el terremoto que se vuelve cuando le tocan a alguien que quiere – sonríe también observándolas.

Dejan de hablar y aunque lo que les gusta es jugar al fútbol cuando se trata de apoyar a las categorías inferiores dejan a un lado su yo futbolista para sacar su yo madridista.

En el descanso con un resultado de 2-0 favorable al equipo local Paris y Alicia van al encuentro de Sergio, el cual aun sigue con Mesut.

     - ¿Qué le pasa a Maca? – Pregunta Sergio observándola sentada en la grada.
     - Ni puta idea - contesta Alicia.
     - Esa boca – dice Paris tapándole la boca.
     - Tiene razón – dice Mesut – cuida con esa boca.
     - Mira quien lo dice el que tiene un máster en insultos en español.
     - Es lo primero que tiene que saber un futbolista cuando va a jugar a otro país.
     - Sí claro, y yo soy rubia – deja a Paris en el suelo.
     - Igual lo eres.
     - Soy igual de rubia que tú.
     - Que peleas mas estúpidas tenéis siempre.
     - No peleamos.
     - Intercambiamos opiniones – sonríe Alicia.
     - Por cierto Mesut, el lunes cuando volvamos de Barcelona, ¿te vas en tu coche?
     - Si – juega con Paris.
     - ¿Te importa si volvemos contigo?
     - Te llevas el coche – afirma mirando a Alicia.
     - Eh… sí – sonríe.
     - No me importa, así disfrutamos juntos de la victoria.
     - Que claro tenéis que vais a ganar – mira Alicia a ambos.
     - ¿Estas diciendo que vamos a perder? – pregunta Mesut.
     - No.
     - Pensaba.
     - Pero… - añade Sergio.
     - Lo veo complicado, arbitra Iturralde – los mira muy seria-. Pero ánimo que vosotros podéis.
     - ¿Te estas cachondeando de nosotros? – le pregunta Sergio pasándole el brazo por la cintura.
     - No – lo abraza por el cuello-. Seguro que ganáis – sonríe y le da un beso en los labios.
     - Vais a perder – le dice Paris a Mesut.
     - Muy espabilada eres tu – le hace cosquillas.

En un lado del palco Alicia y Sergio se demuestran su amor con miradas, besos y secretos. En otro un Mesut cabizbajo observa a una Paris feliz que observa y toca todo lo que esta a su alcance entre esas cuatro paredes.

Mira a la traviesa Paris. Mira a una Alicia sonriente y feliz que abraza y besa a un Sergio cariñoso.

Mirada de un rostro a otro, rostros diferentes y felices ajenos a él. Ajenos a que esta ahí sentado deseando que de comienzo la segunda parte del partido para que Alicia vuelva a su sitio y se separe de Sergio.

     - Podría ser yo quien esta abrazándola – piensa-. No es cierto – dice con rabia en voz tan baja que ninguno de los presentes en la sala se da cuenta.

Ninguno de los dos adultos se percata de ese chico pensativo y dolido pero si la pequeña Paris que despacio se acerca a Mesut y le da un abrazo y una caricia que inmediatamente le saca una sonrisa.

     - ¿Venís o te vas a quedar magreando con tu novio? – interrumpe Macarena.
     - Habla la que a estado toda la primera parte con la cabeza no se donde – contesta Alicia mirándola.
     - No discutáis – les pide Sergio.
     - Lo hacemos con cariño – dice Macarena abrazando a Alicia.
     - ¿Vienes o te quedas con Mesut? – le pregunta Alicia a Paris ofreciéndole la mano.
     - Mess – contesta la pequeña.
     - ¿Te la quedas? – mira a Mesut.
     - A mí no me molesta pero si se pone pesada te la devolveré – la mira sonriente.
     - No des mal – le da un beso a su sobrina.

Termina el partido con un 3-1 a favor del equipo blanco y los jugadores del primer equipo que han presenciado el encuentro acuden al comedor a comer antes del último entrenamiento excepto Sergio que junto a su novia, su sobrina apegada y Macarena acuden a un restaurante cercano a la ciudad deportiva.


Los desplazamientos a la ciudad condal son complicados y todos saben el riesgo que corren. La afición rival no tarda en sacar a relucir que están en territorio enemigo.

La expedición blanca aterriza en el aeropuerto El Prat donde son recibidos por 2.000 aficionados madridistas que muestran todo su apoyo tanto a jugadores como a cuerpo técnico.
Escoltados hasta su hotel de concentración, donde permanecerán hasta pocas horas antes de que de comienzo el partido, el ambiente es cada vez más hostil.
Junto a insultos desagradables piedras y botellas impactan contra los cristales del autobús provocando que una de las lunas se rompa, por suerte sin causar daños personales.

Falta poco para cenar y los jugadores están metidos en sus habitaciones, para evitar cualquier incidente, llamando a sus familiares y amigos tras haber salido lamentable echo en el telediario.
Tras tranquilizar a sus seres queridos la plantilla con rostro serio y de preocupación baja a cenar.


Ajena a la conversación de Nicole y Santiago, Macarena observa la pantalla del móvil ignorando a todo aquel que le habla por WhatsApp.

     - Capullo – susurra sin quitar la vista del iPhone.
     - Déjala que este en su mundo – le dice Nicole a Santiago.
     - Mira quien hay ahí – señala Santiago a la maquina de refrescos.
     - ¿Quién? – Se gira Nicole – pero si se iba a Barcelona – la ve acercarse-. No vas a llegar a la estación – le dice cuando ya la tiene cerca.
     - Al final me voy en avión – contesta seria sentándose enfrente de Macarena.
     - ¿Y esa cara? Ni que hubieras visto un fantasma – dice Santiago.
     - Casi – frunce el ceño tras mirar a Macarena-, mañana me estreno en la radio de la uni.
     - ¡Genial! – grita Nicole.
     - Miedo me da porque es como un examen.
     - ¿Habrá alguien mas de tu clase?
     - Es un debate sobre la jornada, más bien sobre el Barça – Madrid, con Alejandra.
     - Le vas a dar un baño – ríe Nicole.
     - ¿Dónde se puede escuchar? – pregunta Santiago.
     - Creo que en la web, es a las 4 de la tarde.
     - Te escucharemos – sonríe Nicole – lo harás fenomenal – le da un abrazo.
     - Que flower power estas últimamente – le dice Santiago.
     - Por qué será – la mira Alicia.
     - ¿Por qué será qué? – pregunta Iván colocando la mano sobre el hombro de Alicia.
     - Que Nic esta tan flower power – contesta Santiago.
     - Porque…
     - No lo digas – le tapa Nicole la boca a Alicia - ¡Ah! No muerdas puta- se queja de la mano tras un mordisco de Alicia.
     - A saber que os tramáis – dice Iván-. ¿Y a está? – indica a Macarena con la cabeza.
     - Eso ya no lo se, lleva así todo el día – contesta Nicole mirándola.
     - ¿Sabes algo? – Mira Santiago a Alicia.
     - No.
     - ¿No estuviste ayer con ella?
     - Sí, pero desde el… - se calla y se queda pensativa.
     - ¿Desde? – dice Iván.
     - Nada, tengo que irme - se levanta-. Mañana nos vemos – le da dos besos a cada uno empezando por Iván.
     - Ten cuidado – le dice Santiago al oído.
     - Lo tendré – sonríe-. Despedirme de la loca esta – señala a Macarena. 

Mucho ánimo a Muamba y su familia.